CULTURA

El doblez, inicio de un juego que se convirtió en arte: Felipe Covarrubias

*“En Papel Arte”, de Alberto Sotelo Espinosa, se exhibe en Casa Colorada de la Pinacoteca Universitaria.



“Uno puede hacer un avioncito de papel y lanzarlo; ése el principio de la diversión, hacer un doblez y ver qué sucede. A veces se queda en eso, en un avión, pero en otras se convierte en grandes piezas”, así inicia Felipe Covarrubias a describir la muestra de origami “En Papel Arte”, de Alberto Sotelo Espinosa, que se exhibe en la Casa Colorada de la Pinacoteca Universitaria.

Felipe Covarrubias es el curador de esta muestra de piezas de papel, mejor dicho, del gusto por jugar a crear arte mediante dobleces de papel.

“Siempre es un juego. Esto tiene principios geométricos, sobre todo si uno ya está en un plano, en una lámina plana y quiere obtener una figura tridimensional. Esto sólo con ingenio con paciencia y con talento, se puede lograr”.

Esto es precisamente lo que vamos a encontrar a lo largo de esta exposición abierta al público la semana pasada: desde la pieza sencilla, hasta aquellas que forman animales, platones, floreros, aviones.

“Las piezas están hechas con la paciencia de un franciscano o un monje amanuense del siglo VIII o IX, cuando los monjes escribían las biblias con sus dibujos, los pasajes evangélicos; para eso se necesita paciencia dedicación y pasión hacia el material, la pasión por el papel, para el doblez; porque el arte no tiene dobleces, pero es muy curioso que en esta exposición, el arte está resuelto al doblar doblando, y doblando una vez y otra vez, y otra vez más”.

El guion museográfico, de acuerdo con Covarrubias, está elabora de tal manera que quien visite la Casa Colorada “se encuentre con la génesis, la evolución, la geometría, el proceso, la lúdica, la academia, la geometría, la aritmética y el barro”.

Quien llegue hasta esta exposición “la va a disfrutar, gozar, se va a divertir, porque no hay persona que no recuerde cuando hizo el avioncito o el barquito que hizo de niño, o el albañil que hizo un gorro para que el pelo no se le llenara de mezcla, de tierra, pero fue su niño quien le recordó cómo hacer un doblez; para mí ese es el principio: doblando, doblando y doblando, y así uno llega a En-papelarse, con N de niño, no con M de mamá”.

Esta muestra permanecerá abierta hasta el mes de junio.

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COLIMA
Mayo 21, 2018